miércoles, 4 de febrero de 2009

Que el letrista no se olvide de los tangos de Clarín...

Hace dos días descubrí, gracias a la red de redes, que podía escuchar la programación completa de Clarín, esa radio uruguaya dedicada al tango. Ese hallazgo llegó por 'culpa' de un cuento que estaba escribiendo para el taller, para el que necesitaba algún dato concreto como a qué hora sonaba Troilo o cuáles eran las horas del folclore.

Para quienes me leáis desde aquellas tierras, quizá esta entrada os parezca una ridiculez, pero necesito explicar a quienes jamás han escuchado esta radio la extrañeza que supone para alguien de 'fuera' (aunque no creo que pueda admitir eso de sentirme foránea en un lugar como Montevideo, pero bueno...) una programación en la que a todas las horas pares suenan 30 minutos de Carlos Gardel, ese músico por cuyo nacimiento se pelean dos (e incluso tres, si metemos a Francia en la pugna) países y a todas las impares folclore; o esos anuncios con voces como de otro tiempo y entonaciones rimbombantes; o esas advertencias (que sólo pueden darse en Uruguay) para que la gente no tome mate mientras maneja porque, en caso de frenazo, la bombilla puede acabar con su vida.

Disfruté de Clarín en momentos inolvidables, cargados de Belleza (así con mayúscula), e imagino que eso la convierte en parte de mi universo particular...

Lo más gracioso fue descubrir (qué soberbia la mía, pensar que esa radio sólo integraba mi mundo y el de nadie más) que una canción de Jaime Roos la mencionaba. A finales de 2007 escuché por primera vez "Que el letrista no se olvide..." y, semanas después, al intentar desgranar cada una de las frases del tema entendí en una de sus estrofas eso de "...los tangos de Clarín".

Ahora ya he descubierto que esa emisora resume muy bien la idiosincrasia del pueblo uruguayo (o al menos del que yo conozco, que después de leer el comentario de Santi el otro día no creo que sea más de una ínfima parte). Por si acaso, ahí va el siguiente anuncio (leído con la entonación que antes mencioné):

"Gardel... folclore... candombe...

asado de tira... fútbol...

tortafrita cuando llueve...

boliche... truco con muestra...

mate y termo...

Clarín clavada en el dial,

¡qué lindo es ser oriental!"

(Bar Fun Fun, en Montevideo)

15 comentarios:

Unknown dijo...

Qué entrada preciosa Amelie. Clarín, vista desde afuera, aunque no tan afuera. Qué cosa rara. Tú me dirás si es cierto o no, pero yo tengo la sensación de que los uruguayos tenemos un problema con el pasado. El pasado nos abriga y nos tranquiliza, nos da la seguridad provinciana que tanto disfrutamos hasta los 70. Solamente eso explica la supervivencia de una radio como Clarín que tiene una estética de los años 30. Clarín fue el paisaje sonoro de mi infancia, porque era la radio que escuchaba mi viejo y todos los viejos y mi suegro. Pero mi viejo nació en el 20 y mi suegro en el 18. Sin embargo, hoy, desde cualquier boliche de cualquier barrio de Montevideo se escucha salir por las ventanas la misma voz, con la misma grandilocuente entonación:"...tango y folclore para la cuenca del Plata..." Es increíble, ¿no? No sé si eso es bueno o malo. Pero es raro, a casi medio siglo de la aparición de los Beatles.
Con respecto a tu afirmación de que Clarín resume la idiosincracia uruguaya, es cierto. A veces no parece. Pero sí, es algo subyacente, vinculado a la rambla, a pescar en la escollera, al mate, al Club Social y Deportivo. Aunque andando por los barrios nos aturdan las cumbias y los "romántico latino", en algún momento más allá o más acá de los 50 o los 60 años, todos vuelven al mate y a Clarín.

Una canción de Jaime muy linda para "desgranar" es "Brindis por Pierrot" y ahí está también esa "idiosincracia" muy presente, y está llena de alusiones a cosas muy locales que no todos conocen.
me gustó mucho tu entrada.

CASANDRA dijo...

Grande Amelie!!!!! que honor, que orgullo que desde allí nos hables de estas cosas, tan de todos los días...Ese sentimiento de pertenencia a ciertas tradiciones o costumbres. Somos ciudadanos del mundo. Yo ando todos los días paseandome por tu querida España desde este Uruguay que adoro, y saco de cada cosa algo para disfrutar y vivir. Que el letrista no tendrá que olvidarse de estos vínculos maravillosos que surgen a través de la internÉ!!!

amelie dijo...

SANTI: Gracias por tus lindas palabras. Sí, la sensación que tuve al escuchar (escucharla bien, porque alguna vez había oído sus tangos, pero no sus locutores, sus anuncios...) era la de estar en una película de los 30. Luego me di cuenta de que Bajofondo (o Supervielle, ya no sé en cuál de los dos proyectos) hicieron un homenaje en "Leonel el Feo", presentando al dúo Cristóbal Repetto-Daniel Melingo al estilo Clarín. En fin, es muy fuerte la sensación que me provoca escuchar esta emisora y sentir que, a pesar de que muchas cosas cambien, hay cosas que no. Y sobre todo, como bien dices, verlo desde fuera pero no tan fuera.
Me encanta "Brindis por Pierrot", de hecho me emociona cada vez que la escucho. Y he oído a Jaime hablar algo de ese tema, con la voz del Canario Luna y demás, pero igual me faltan unas cuantas imágenes 'yoruguas'. Sé que podré entenderla por completo dentro de poco. Pero sí, tienes razón en eso de que resume bien la idiosincrasia uruguaya. Igual ahora estoy enganchada a "La Margarita", esa joya que conocí hace poquito y que también tiene mucho de esa cotidianidad de barrio antiguo. Al menos ésa es mi impresión...
Un beso muy grande y gracias, otra vez, por lo que dices...

CASS: amigaaaaa, qué lindo eso de verla tan seguido por acá. Primero, increíble lo de la Liguria que decías en otra entrada (no te puedo creer!!!). Sobre lo que dices aquí, totalmente de acuerdo: yo ya pedí hace mucho tiempo la ciudadanía del mundo porque eso de las fronteras me da un poquito de pereza y son algo (lamentablemente) circunstancial para el ser humano. Un beso enorme y un abrazo que te tiña de naranja

Anónimo dijo...

Hay una montevideana que es española o hay una española que es montevideana ...

Eso es lo único que puede explicar entradas como esta.

Clarin es de esas cosas increíbles que seguimos teniendo e increíblemente sigue existiendo gente como tu que ve bello una forma tan salida de los parametros que hoy tiene nuestro mundo.


abrazote
dani

Un tal Iván dijo...

Suscribo todos los comentarios, así que voy a tratar de no repetirlos.
Empecé a escuchar Clarín porque no tenía mas remedio. Recién llegado a Montevideo, con 14 años, entré a trabajar de aprendiz de carpintero. Desde ese primer taller y pasando por todas las carpinterías donde trabajé –durante veinte años-, no se escuchaba otra radio que ésa. Aún -creo- sigue siendo así. Aprendí, a la fuerza, a querer el tango, a conocer las orquestas, los cantores, las letras, etc, A veces hacía un poco de tiempo antes de prender una máquina, porque quería terminar de escuchar algún tango que me gustaba. Era un bicho raro en mi generación –épocas de Travolta, Bee Gees, Abba…-, pero guardo esos recuerdos con cariño. Creo que Clarín ya es parte de nuestro patrimonio cultural.
Sobre la cuestión de donde nació Gardel, voy a contarte dos cosas que una vez me enseñó un tipo sabio, SABIO de verdad, de los que son, además, realmente humildes. Veterano, pero con apariencia de viejo, chiquito y encorvado, hablaba con voz suave y sin grandes ademanes. Boris Puga, que así se llama, forma parte desde hace muchos años de Joventango, y, hace también muchos años, me anoté para unas charlas que daba sobre historia del tango. Al escucharlo daba la sensación que no había nada del tango que él no supiera, contaba detalles de músicos desde principio de siglo en adelante. Era delicioso escucharlo, por ejemplo me enteré que un Astor Piazzolla niño aparece en una película de Gardel, de canillita (para los gallegos: vendedor callejero de diarios). Pero además de cosas curiosas como esa, me dejó conceptos de fondo, pesados.
El primero es el siguiente: no hay que confundir las fronteras culturales con las fronteras políticas. Esto vino a cuento de la pregunta ¿Dónde nació el tango, en Buenos Aires o en Montevideo?. Ahí nos explicó que el intercambio cultural en el Rio de la Plata de las primeras décadas del siglo XX, era tan intenso, que no se lo puede dividir, la respuesta es esa: el tango nació en las orillas de ambas capitales que, culturalmente eran lo mismo, nació en el Río de Plata. El Vapor de la Carrera que hacía la travesía entre las dos ciudades, llegaba repleto de porteños que venían a bailar en las milongas montevideanas y volvían al otro día de madrugada, y lo mismo pasaba con los montevideanos que iban a Buenos Aires.
El segundo es éste: no importa tanto donde uno nació, lo importante es donde uno eligió vivir. No recuerdo bien, pero creo que el pensaba que había nacido en Tacuarembó, si embargo opinaba que había un argumento que los argentinos nunca habían utilizado como corresponde. Decía que mas allá de donde haya nacido Gardel, él decidió ser porteño, no hay dudas, eso no tiene discusión y es lo que importa. Aunque para ser coherentes con la primer idea, podríamos también decir que Gardel es rioplatense.
Se me ocurre que con lo que vos sabés de nuestra cultura, y con el amor que le tenés al Río de la Plata y al Uruguay, el océano se hace un arroyito.
Arriba bo!

amelie dijo...

DANI: como ya le decía a Cass un ratito antes, ya pedí la ciudadanía del mundo tiempo atrás. Imagino que esta entrada sólo se explica desde el amor, quizá como tú dices, desde el intentar contar algo desde fuera pero al tiempo desde el adentro. En fin, medio complicada la explicación, amiga (y más ahora que escucho a Cabrera, chau).
Sí, es cierto que Uruguay tiene esas cosas medio fuera del mundo (ese mundo que se tiene por normal) como Clarín o como me hizo recordar Santi y no comenté antes, eso que él llama "problema con el pasado". Me acordé de la noche de la nostalgia, algo bien 'friki' que diríamos aquí. Pero creo que justamente ese anclaje en la nostalgia, en el pasado, en el aire tanguero es el que da un aire tan increíblemente especial al país. Sé que para mucha gente es un bajón. Para mí es maravilloso poder vivirlo (aunque sea así de a ratitos...) Quierote, amiga. Beso grande

IVÁN: empiezo justo por el final, porque me emocionó lo que dijiste. Sí, en realidad, a juzgar por las veces que crucé el océano podría decirse que no es más que un arroyito jajaja...
Más allá de las historias compartidas sobre carpinterías, sobre Clarín y sobre músicas varias, me encanta todo ese aporte que haces sobre el famoso debate "¿dónde nació Carlos Gardel?" y ese rotundo argumento de "mucho más importante que el lugar donde se nació es el lugar donde se eligió vivir". Justo el otro día yo tenía una intensa discusión sobre inmigración y sobre la importancia que yo daría a la abolición de pasaportes, a la necesidad de pensar en la felicidad que una persona encuentre en tal o cual lugar del mundo (haya nacido o no en ese lugar). En fin, me fui por las ramas. Gracias por asomarte a esta ventanita naranja y sigue ofreciendo al mundo fotos tan bellas como la última que subiste... Un beso grande

CASANDRA dijo...

Buen día Amelie. Viste? otro día más que te visito... se me está haciendo costumbre. Te cuento. Leí los comentarios y de todos extraigo algo que me gusta (tengo esa "dificultad"..jajaja) En particular quise entrar en el blog DE UN TAL IVAN, pero no tiene acceso, así que por "éste único medio" querída decirle que me conmovió y me resultó sumante aleccionador e interesante lo que comentó. Me gustó eso de las fronteras políticas y las culturales. Y en particular me dejó pensando que a veces uno puede parecer muy chauvinista o apegado a su nacionalidad y en mi caso no es así. Amo este este país, como amo en particular el lugar donde nací. Me marca una pertenencia y amo otros lugares que no conozco y que me gustaría conocer y mezclarme con su gente (no un viaje para nada turístico, y menos en crucero) y respirar su vida, sus calles, sus costumbres. Es como amar la familia que uno puede tener la suerte de tener y amar a los amigos y sus hijos e integrarlos a nuestra propia vida como patrimonio de nuestra humanidad de motu propio (sin declaración mediante de la Unesco, jajaj). Bueno me extendí más de lo habitual, me desperté extrovertida, jajaja, y espero haberme hecho entender sobre todo en mi sentir, que siempre trata de sumar.

Raúl Avila dijo...

Qué grande Amelie!!!!
Tenés que avisar cuando vuelvas por acá y tenemos que hacer campaña para declararte CIUDADANA ILUSTRE de Montevideo.
Tengo grabado a fuego en mi corazón, las mañanas de mi infancia en casa de mi amigo Marcelo, su madre con el delantal haciendo algún puchero y Derly Martínez diciendo (como sólo él sabía): "música típica y folklórica para al cuenca del plata"
Qué nostalgia!!!
Gracias Amelie

CASANDRA dijo...

estoy de acuerdo con RAUL, así que vamos haciendo la lista de los presente cuando hagamos el homenaje. como ves seguis teniendo buenos motivos para venir por el barrio...

Anónimo dijo...

No me queda ninguna duda de que eres una "yorugua" más.
¡Qué emoción tener una ciudadana más, en este paisito tan pequeño!

Solamente quiero aportar algo al respecto de lo que comentaba Raúl.

"Derly Martínez diciendo (como sólo él sabía): "música típica y folklórica para al cuenca del plata"

Mi aporte es decirte que Derly, lamentablemente se jubiló.
Hace bien poco que lo vi por TV y decía que seguía extrañando la Radio (como nosotros a su voz inconfundible). Tanto extraña, que se hace unos viajecitos (desde donde vive), hasta la Radio.
Porque él también la siente propia, más que a su casa.

Así somos los uruguayos, revalorizando todo lo que sea pasado. Creo que está muy bien, mientras no nos perdamos el presente y el futuro y también aprendamos a quererlos.
Te felicito por todo lo que escribís y hacés. Sos una preciosa persona y además muy querible.
Besos
(Soy la esposa del Santi).

andal13 dijo...

Radio Clarín forma parte del genoma de los uruguayos, a estas alturas, con su música "típica y folclórica para la Cuenca del Plata, desde el corazón del MerCoSur".

Y qué decir de su locutor (uy, no recuerdo su nombre, qué horror), que ya forma una entidad indivisible con el micrófono, que con su inconfundible voz no sólo anuncia a Gardel a todas las horas pares, sino que pasa la publicidad, de cosas tales como "Armería La Martineta" y da los consejos como ese de la bombilla que mencionás.

Besos desde las orillas del Plata.

Anónimo dijo...

Cuanta verborragia, cuanto afecto translatlántico.

Amelie sabrás en tu interior q algo te falta, algo del otro lado, tendrias q´ saltar el charco.

A los sudamericanos nos sobra mucho y sabemos darlo (no nos roban).

Saludo cordialisisimo...

amelie dijo...

RAÚL: jajajaja, muchas gracias por lo de CIUDADANA ILUSTRE. No sé si merezco tanto, aunque desde luego si es por amor, sí, seguro que un cachito me corresponde jajajaja... Pero gracias igual por la propuesta. La última vez que estuve la barra 'virtual' montevideana (o sea Cass, Lu y Fiore) me hicieron un recibimiento muy loco. Con eso y mi 'familia' (la llamo así porque el amor que me une a tanta gente de allá supera eso de 'grupo de amig@s') ya es más que suficiente...
Gracias por compartir esa anécdota de tu amigo Marcelo y lo de Derly Martínez. Cada vez voy sumando más datos jajaja...
Un beso muy grande y gracias, de nuevo, por tus palabras.

CASS: lo dicho a Raúl jajajaja...

BEA: bueno, bienvenida a este rinconcito naranja y más de la mano de quien viene. Cuánto orgullo, por favor, tanta palabra linda. Sabía que esta entrada removería cosas por el paisito pero no sabía que tantas jajaja...
Qué bueno todo ese anecdotario que estoy juntando gracias a todas las aportaciones que estáis dejando acá. Un beso enorme y pase por aquí siempre que quiera. Habrá un matecito para compartir (of course).

amelie dijo...

ANDAL13: sí, qué grande eso de la publicidad. No hay solución de continuidad entre el final de las canciones y los anuncios. Cuando termina de decir eso de "¡¡¡De Le Pera y Gardel "Por una cabeza", Carlos Gardel!!!" de repente llega "si tiene problemas de audición no deje de visitar Mayco en 18 frente al Entrevero" y claro, ya me veo yo al lado de la Sala Zitarrosa visitando el negocio jajajaja... En fin, muy loco lo de Clarín. Pero muy hermoso.

Gracias por pasarte por aquí. Ya sabes que siempre hay un huequito por acá para tus comentarios. Beso desde Madrid

PROFECTUM: epaaaaaa, cómo viene la mano. Nada menos que 'tendrías que saltar el charco' jajajaja. Hablábamos un día con una amiga que el lugar para vivir es donde están los afectos, es decir, tu gente más cercana. Y claro, yo le daba la razón, pero le preguntaba: ¿y cómo se hace cuando los afectos están en lugares tan separados? Pues esa es la pregunta lanzada al océano en botella (se puede elegir si de ribera del duero o de tannat). Un beso y hasta la próxima...

Zully dijo...

Amelie, y si hacemos un "cambio de domicilio" al menos por unos meses? Tú te vienes a Montevideo por tus afectos y yo me voy a España - Vigo por lo mismo (te dejo mi casa con mis dos "ninja adolescentes mutantes" incluídos, jajajaja).-
Radio Clarín acompañó mis despertares semiadolescentes, ya que la pared de mi dormitorio pegaba a la del cuarto de mi abuelo gallego. Luego, en mi juventud, tuve el privilegio de ser locutora del programa de Joventango por Radio Sport. Salíamos al aire de lunes a viernes después del informativo compartido con Radio El Espectador. Por aquél entonces, conducía Raúl Laurenzo. Una época deliciosa.
Con el paso de los años de dos hijos y un divorcio, me enamoré de un gallego y las idas y venidas Montevideo - Vigo y viceversa, se han ido dando en el tiempo. Amo Galicia y Vigo, me gusta la parte del resto de España que llevo conocida hasta el momento, pero sé que de irme, moriría de "tanguéz" y nostalgia. Aunque también vivir así, tan alejados físicamente de momento, es otra forma de morir de nostalgia.
Lindísimo post Amelie. Un besote :)